El caso de Gary es uno de los más curiosos entre los Metis de la Justicia Metálica: sus padres violaron la Letanía, pero se las apañaron para poder evitar el castigo mortal y permitir vivir a su hijo deforme. Desde muy pequeño, se le fue inculcando la idea de que, al ser una transgresión, no iba a hacer nada notable por Gaia. Esto se le quedó bien grabado y Gary se esforzó el triple para demostrar su potencial como guerrero Garou.

A día de hoy, ha demostrado ser uno de los más hábiles investigadores en misiones peligrosas, demostrado un uso excelente de sus cualidades de cambiante y sus dones de Ragabash. Como premio por su esfuerzo, Sophie Kult lo reclutó para liderar los equipos de Flambert, unos Parentela insuflados por energía primordial.