Investigador ruso que fue abrazado a finales del siglo XIV. Siendo un erudito, evitaba el combate siempre que podía. Si era forzado a pelear, Vladimir daba buen uso a su Potencia y su Vicisitud.

Conoció a Erik Angelus en Praga, cuando este comenzó su farsa Ventrue. Los dos congeniaron muy bien y comenzaron a compartir secretos, historias y metas personales. Años después, a principios del siglo XVIII, Vladimir le confesó a Angelus que había encontrado un Tremere diabolista en París; quería capturarlo con la ayuda del falso Ventrue y registrar la biblioteca mística del Tremere.

Al final, Angelus se adelantó y asesinó él mismo al Tremere. Como éste vampiro estaba siendo instruído por Superbia, ésta localizó a Angelus y tuvieron un combate sangriento. Tras casi acabar con el falso Ventrue, la Estigma se retiró debido a que estaban apareciendo por la zona demasiados vampiros poderosos. Vladimir, sintiéndose utilizado, insultó a un moribundo Angelus y entró en la biblioteca del Tremere. Allí, encontró varios libros que utilizaría más tarde para insulfar la pseudo-inmortalidad a su Ghoul favorita, Aya.

En 1999 fue llamado a una reunión en Bilbao por el príncipe Dominique Dimanche. Allí, un enorme Crinos que despedía energía espiritual negra acabó con la mayor parte de la asamblea vampírica, siendo detenido por Erik Angelus. Vladimir envió en un principio a Aya, pero después de lo que ésta descubrió decidió ir él mismo para desenmascarar a su antiguo compañero y farsante Ventrue.

Antes de que pudiese terminar su cometido, Vladimir fue acusado de traición y asesinado por Dante Arcanum, Andréa du Soleil y Erik Angelus en una rápida batalla en las ruinas del elíseo bilbaíno. Aya, que era como una hija para él, sobrevivió y juró vengar a su mentor.