Con el Don de Kali, el Nagah desarrolla armas y armaduras naturales. Sobre la escamosa piel del hombre serpiente se forman pesadas placas óseas que le proporcionan una defensa natural contra la mayoría de los ataques y a la vez, aumentan el daño que inflige en los combates cuerpo a cuerpo.

El jugador gasta un punto de Gnosis y uno de Rabia, después hace una tirada de Resistencia + Impulso Primario para hacer la armadura. <br/> Las placas óseas cubren todo el capuchón del Nagah y su torso, brazos y bajo vientre, sumando 3 dados a sus reservas de absorción. <br/><br/> Las placas de los brazos, codos y hombros son puntiagudas y muy afiladas, de modo que el hombre serpiente inflige un daño de Fuerza + 3. Al igual que las garras de los Garou, es daño agravado. <br/> La armadura no afecta a la movilidad del Nagah, pues no protege todo el cuerpo. El capuchón del Nagah se extiende desde la coronilla hasta la mitad de la espalda, así que los órganos vitales están protegidos de los ataques por el frente y por la espalda, pero no por los flancos.